Una de las firmas hoteleras de gran lujo más prestigiosas del mundo se alía con el chef para el desarrollo de Royal Mansour Tamuda Bay, un paraíso único a orillas del Mediterráneo.

“Es una marca icónica en el mundo y su estrategia de situar los proyectos a lo largo de la geografía de Marruecos para el desarrollo del turismo nos permite escenificar nuestra gastronomía de un modo privilagiado", dice Dacosta que, junto a su equipo, ha creado dos excelentes conceptos gastronómicos donde huéspedes y clientes podrán deleitarse de la gastronomía de uno de los mejores cocineros del mundo.

Le Méditerranée

En este restaurante de pura esencia mediterránea el Dacosta transforma las especialidades de su tierra, como el arroz cocinado en paella, en platos sublimes. Con vistas a la playa, en este espacio dominado por el azul y el blanco, desde el suelo de mármol hasta la vajilla sutilmente nacarada, los comensales pueden saborear maravillosas ensaladas y exquisitos platos de marisco. Crudos o cocinados, los pescados, mariscos y crustáceos se preparan con maestría, como el delicado carpaccio de carabineros con huevas de trucha, las increíbles langostas con gratinado de erizos de mar o el delicioso guiso de rape con cintas de sepia. La carta de postres que propone el chef es rica en sabores y texturas refinadas, y sirve de broche de oro a la comida, complementando a la perfección los platos salados.

Pool Beach

Este sofisticado restaurante une una Infinity Pool de ensueño con la exclusiva playa de Tamuda Bay. En él, se ofrecen las impresionantes «Palmas», basadas en el concepto bento. Inspiradas en sabores de todo el mundo que escenifican los viajes del chef desde los inicios de su carrera, han sido creadas en exclusiva para el Royal Mansour Tamuda Bay, generando una escenificación sofisticada y visualmente atractiva de un concepto que aúna el carácter viajero del chef y los excelentes productos de la zona como quesos, pescados o mariscos.

 

El resort cuenta además con la colaboración de dos cocineros galardonados con tres estrellas Michelin cada uno: Massimiliano Alajmo se ha ocupado de crear una propuesta de cocina italiana en el restaurante Cocinella, mientras que Éric Frechon en La Table, con impresionantes vistas a Cabo Negro, impregna su cocina de matices japoneses y toques marroquíes.